INGREDIENTES
- Un paquete de obleas para empanadillas
- Una cebolla
- Dos huevos
- Un paquete de bacon cortado en tiras
- Nata
- Queso rallado (use emmental)
- Sal y pimienta al gusto
ELABORACIÓN
Pelamos y picamos la cebolla y la ponemos a pochar con un poquito de aceite de oliva.
Mientras preparamos en una bandeja de hornear magdalenas y ponemos unos papelitos monos de magdalenas (así además vestimos un poco el plato y nos lucimos más jeje). Colocamos en cada molde una oblea de empanadilla y la acoplamos al hueco.
En un cuenco ponemos los huevos y los batimos bien con varillas.
Cuando la cebolla esté pochadita le añadimos el bacon y lo doramos al gusto. Cuando esté lo añadimos al huevo y lo mezclamos bien.
Le añadimos ahora el queso rallado, en mi caso un buen puñado porque me encanta, pero cada uno lo que le guste. También ponemos un buen chorro de nata. Salpimentamos al gusto y mezclamos bien.
Cuando todo este bien mezclado lo vamos repartiendo en las obleas, cuidando que todas estén proporcionadas de relleno sólido pero también de líquido.
Ahora que están todas llenas, ponemos un poco de queso rallado por encima de cada una de las miniquiches, así en el horno se fundirá y formará esa capa de queso delicioso por encima...
Las metemos al horno precalentado a 200ºC durante unos 10-15 minutos aproximadamente. Es un poco a ojo, cuando veais que la oblea se está dorando y que el queso se ha fundido bien se pueden sacar. Las dejamos enfriar un poco y servimos.
Fácil ¿verdad?. Pues imaginaros la cantidad de rellenos que se pueden hacer... Imaginación al poder!!!! Vivan las cosas que sirven para muchas funciones jejejejeje
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