No importa dónde mires, la comida que consumimos se aleja cada vez más de la naturaleza. Los estantes de los supermercados están llenos de alimentos procesados con conservantes y aditivos difíciles de pronunciar. Cuando no compramos comida en el supermercado, cenamos una hamburguesa con queso y papas fritas.
Cuando piensas en el efecto que este tipo de dieta puede tener en tu salud, es preocupante. No es de extrañar que las tasas de obesidad, enfermedades cardíacas, diabetes y otras enfermedades metabólicas hayan aumentado de manera constante en los últimos años.
Una variedad de frutas y verduras que puedes incorporar a tu dieta.
Para evitar ser parte de estas estadísticas, puedes comenzar a adaptar tu dieta más a la naturaleza, y eso significa comer más frutas y verduras. ¡Aquí están las 10 razones principales por las que es una gran idea!
Las frutas y verduras son una gran fuente de vitaminas y minerales. No encontrarás una mejor fuente nutricional que las frutas y verduras, que están repletas de vitaminas A, C y E, así como magnesio, zinc, fósforo y ácido fólico. Para obtener potasio, uno de los minerales más importantes para la salud, coma abundantes aguacates, batatas, plátanos, ciruelas pasas e incluso puré de tomate.
Podrá disfrutar de una variedad de sabores y texturas. Con todos sus sabores únicos e interesantes, los alimentos de origen vegetal le permiten ser creativo en la cocina. Puede probar sabores fuertes como cebollas, aceitunas y pimientos, u opciones más suaves como champiñones y maíz. Para los sabores dulces, las frutas como la piña, las uvas o las ciruelas son excelentes, mientras que los limones y los pomelos son más ácidos.
Mucha, mucha fibra. La mayoría de las frutas y verduras tienen mucha fibra para saciarte y mejorar la salud intestinal, pero algunas tienen más que otras. Las verduras ricas en fibra incluyen alcachofas, guisantes, brócoli y coliflor. Las frutas ricas en fibra incluyen frambuesas, peras, manzanas y calabaza.
Son bajas en calorías y grasas. En promedio, las frutas y especialmente las verduras tienen muy pocas calorías y grasas, lo que significa que puedes comer más para sentirte lleno sin preocuparte por las calorías o grasas adicionales. Puedes ahorrar más de 200 calorías comiendo media taza de uvas en lugar de un cuarto de taza de M&Ms. Dicho esto, hay excepciones, como los aguacates, las aceitunas y los cocos.
Protegen contra el cáncer y otras enfermedades. Muchas frutas y verduras contienen fitoquímicos, que son sustancias biológicamente activas que pueden ayudar a proteger contra algunas enfermedades. Eso significa que puedes reducir el riesgo de diabetes tipo 2, derrame cerebral, enfermedades cardíacas, presión arterial alta y cáncer al agregarlas a tu dieta. Específicamente, las verduras crucíferas, como el brócoli, el repollo, la berza y el berro, se han relacionado con la reducción de los riesgos de cáncer.
Las frutas y verduras te ayudan a mantener una buena salud. Debido a que son bajas en grasas saturadas, sal y azúcar, las frutas y verduras son parte de una dieta bien equilibrada que puede ayudarte a perder peso o prevenir el aumento de peso. Además, pueden ayudarte a disminuir la inflamación y bajar los niveles de colesterol y la presión arterial.
Bajo contenido de sodio y colesterol. Las frutas y verduras frescas contienen solo trazas de sodio. Muchas personas piensan que el apio tiene un alto contenido de sodio, pero de hecho, un tallo contiene solo 30 mg, lo que contribuye con el 1 por ciento del valor diario recomendado. El colesterol no existe en las frutas y verduras en absoluto.
Frescas, congeladas, enlatadas, secas: TODAS son nutritivas. Si bien comer frutas y verduras frescas puede ser tu preferencia, no hay mucha diferencia desde el punto de vista nutricional cuando comparas productos congelados, enlatados o deshidratados. De hecho, la mayoría de los productos congelados y enlatados se procesan en cuestión de horas después de la cosecha, por lo que el valor nutricional se conserva rápidamente.
Conveniente, rápido y fácil. A diferencia de las barras de granola o las galletas, muchas frutas y verduras no necesitan ningún empaque. Por lo tanto, puedes tomar fácilmente un plátano o una manzana cuando salgas de casa.
¡Por fin... batidos! Si tienes una licuadora, todo lo que necesitas es fruta y hielo para preparar un delicioso batido con todos tus sabores favoritos. Y aquí tienes un consejo: cuando prepares un batido de frutas, siéntete libre de agregarle tanta espinaca fresca como quieras. La espinaca no empieza a tener sabor a “espinaca” hasta que la cocinas. ¡Ni siquiera los niños pueden notar la diferencia!
Disfrutar de frutas y verduras es una excelente manera de mejorar tu salud y disfrutar realmente de lo que comes. Si bien puede requerir un poco de creatividad, esfuerzo y una mente abierta para probar cosas nuevas, ¡cambiar a una dieta con más frutas y verduras definitivamente vale la pena!
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