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"ESCUELA DE COCINA Y POSTRES   JOAN VILLARÓ"

  =V I V E N C I A S      G A S T R O N Ó M I C A S=

DESPUÉS DE CINCO DIAS LAURA ME LLAMÓ

Comienzo a sentirme mucho mejor, aunque hace cinco días, que  he discutido con mi novia Laura. Es difícil de olvidar todos estos meses maravillosos de convivencia con ella . Ahora, tengo mi mente lo suficientemente despejada para reflexionar y pensar no solo en mi trabajo, ya que  ha sido el detonante de nuestra ruptura. He de reconocer, que siempre me he sentido absorbido por mi profesión  y he dejado un poco de lado mi relación. Mi profesión de cocinero me apasiona, pero hay que saber hasta donde podemos llegar y no olvidar otras cosas también muy importantes como es la de  valorar nuestra etapa sentimental. Una persona que no se sienta querida, a la larga puede sentirse vacía por dentro, pero nuestra vida laboral  nunca debe  ser prioritaria aunque sí es muy importante, claro. Si no hay trabajo o le damos poca importancia, el efecto dominó puede desencadenar en cosas que a la larga también nos afectarán negativamente. Como persona, tengo muchos defectos, y uno de ellos es llevarme siempre el trabajo a casa. Esto, podemos hacerlo de forma puntual, pero no siempre, ya que si no, olvidamos que hay personas que nos quieren y desean que estemos  allí y no con nuestra mente ausente. Esta experiencia me ha enseñado otra lección que amenaza con preocuparme, aunque a medida que avancen los días ya lo superaré, puesto que soy persona luchadora a más no poder y con una gran fuerza de voluntad en muchos aspectos. Ahora, después de escribir esta vivencia en mi diario, pondré música relajante y mañana será otro día. Nada más cerrar mi voluminoso tomo de apuntes, suena el teléfono que tengo justo a mi lado colgado en la pared. Sin apenas moverme de la silla lo descuelgo. Al otro lado del hilo telefónico un suspiro y una voz muy apagada entrecortada y sollozante me contesta. -JOAN........SOY..... LAURA-.

Y hoy............PECHUGAS DE POLLO A LA PIMIENTA CON NUECES

 Freiremos en mitad mantequilla y mitad aceite (no mucho de ambas cosas) 4 pechugas de pollo ya salpimentadas y  abiertas por la mitad. Cuando estén hechas, las reservaremos aparte. Ahora, en este mismo jugo que han soltado, lo colaremos y le añadiremos 2 packs de nata líquida del 18% de materia grasa, la del 36% es solo para montar. La dejaremos reducir hasta que espese pero sin parar de remover, añadiéndole un poco de pimienta verde (se vende en tarritos de cristal) Pasados unos minutos, le añadiremos las pechugas que tenemos aparte ya fritas y dejaremos que hiervan ambas cosas un par de minutos más para que se complementen los sabores. Si la salsa está muy espesa, la podemos aclarar con un poco de leche. Rectificaremos de sal. Sacaremos de nuevo las pechugas, colaremos la salsa y añadiendo unas cuantas nueces y pasas de Corinto por encima juntaremos todos los elementos.